Casarse en el mar con el sonido de las olas y con una puesta de sol increíble, es el sueño de muchas mujeres que aspiran decir el “sí, acepto” rodeadas de agua cristalina y en medio de paradisíacos paisajes. Es, sin duda, una de las locaciones más idóneas para que dos personas sellen su amor para toda la vida, tal y como lo hicieron Susana Zamos y Jovany Garzon, una pareja estadounidense que materializó su enlace nupcial en las hermosas aguas del mar Caribe.
Como toda boda, fueron muchos los retos que Susana, Jovany y los organizadores tuvieron que enfrentar, sin embargo no hubo nada que les impidiera realizar esta increíble ceremonia, en la que no faltaron las sonrisas, el agua y los buenos momentos.
Te puede interesar: Las nueve playas más bonitas para una pedida de mano muy romántica en Lima.
Según los organizadores, realizar un evento de estas características era muy difícil, ya que suponía una ardua labor de movilización. Este hecho comenzó a desmotivar a Susana, hasta que apareció la fotógrafa Sol Tamargo, propietaria del estudio Del Sol Photography, quien tras conocer la fantástica propuesta quedó encantada desde el primer momento, aprovechando la oportunidad de capturar esta boda tan original. Para esta fotógrafa, la idea de una boda en el agua era increíble. “Ya me imaginaba las extraordinarias fotografías que haría. ¿Cuándo volvería a tener la oportunidad de tomar imágenes de una boda en el océano, con una tabla de surf haciendo de altar?”.
La boda, con algunos toques excéntricos, estuvo llena de buen gusto y glamour, pues, para empezar, el mar escogido fue el mismísimo mar Caribe, la estrella turquesa que brilla con fuerza en el norte y centro de América. Específicamente, fue la isla de Cozumel desde la que partieron con dos catamaranes a la Playa El Cielo, donde les acompañaron 100 invitados.
Y como es de suponerse, Susana, la principal creadora de esta boda de ensueño, fue el centro de todos los focos. Su vestido, confeccionado por Maggie Sottero, tenía un tono rosáceo que tras sumergirse en el agua creaba un contraste de colores simplemente exquisito, rasgo característico de una boda fuera de serie.
El despliegue fotográfico fue impresionante. Sol Tamargo junto a su equipo, conformado por siete fotógrafos, hicieron capturas desde todos los ángulos, incluso desde las alturas, utilizando drones para conseguir increíbles resultados. Pero, sin duda, las fotos más especiales procedían de las profundidades marinas, en donde lo novios expresaron todo su amor en el infinito azul del mar.
Si siempre soñaste con una boda original y tienes especial predilección por el mar, no pierdas detalle de este fenomenal acontecimiento. La boda completa la puedes ver en la página de Del Sol Photography.
No te pierdas Cásate en el Caribe: Bahamas, Islas Turcas, Caicos y Jamaica te están esperando para dar el SÍ.
¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?
Suscríbete a nuestra newsletter
Danos tu opinión