Cuando iniciamos una relación, deseamos que esta vaya creciendo y fortaleciendo. De tal manera que, al ir compartiendo nuestras vivencias, encontremos el complemento de nuestras vidas. En el diario vivir, encontramos parejas que se enfrentan a “estándares” de compatibilidad, es decir, que vamos comparando actitudes, detalles, acciones de nuestra pareja con lo que yo hago. Como si la relación fuera una constante competencia para alcanzar ese punto en donde podamos decir… él/ella me ama tanto como yo.
Si te resuena esta situación, probablemente tu relación va fluctuando entre la frustración, momentos de crisis y el consuelo de que sientes amor por esa persona. Por ello, debes tomar en cuenta esto:
Cómo entiende el amor la persona que amas
La definición de amor en cada persona se va formando con las vivencias propias, con los modelos de vida, con lo que aprendemos intelectualmente. Por ejemplo, si viviste la relación de tus padres en la que ellos no mostraban afecto pero se cuidaban mutuamente, probablemente pensarás que las muestras de afecto en público no son tan relevantes para una relación. Pero si viste a tus padres tomarse de la mano, bailar abrazados, besarse…probablemente para ti, sí sea muy importante la manifestación del afecto frente a los demás. Por ello es necesario conocer cómo entiende el amor la persona que amas, de tal manera que te des cuenta, si en su forma de ser, te esté manifestando todo su amor por ti.
¿Qué tipo de amor estás viviendo con tu pareja? ¡Descúbrelo!
De lo único que puedes estar seguro es del amor que tú sientes
Nadie puede estar totalmente seguro de cuánto le ama la otra persona, ya sea tu mamá, una amistad, tu hijo, tu pareja… Porque el amor es un sentimiento y por lo tanto no puede ser calculado o cuantificado.
De lo único que puedes estar seguro es cuanto amas tú y de cómo es ese amor. Tus afectos, tus pensamientos, tu fidelidad y todo aquello que quieras compartir, debe estar basado en ese amor que tú sientes. Más no, en la espera de obtener algo por ello o si se lo merece o no, porque en tu “ranking mental” no hizo los “méritos” que esperabas.
Por ello, nunca desestimes el amor que tu sientes, manifiéstalo como te nace. Duele más el amor que callamos y no manifestamos en su momento, duele más vivir con el remordimiento del “por qué no lo dije” o “por qué no lo hice”. Además es la forma como la otra persona va conociendo tus sentimientos.
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Nunca se deja de conocer a la persona
Cada día debemos conocer un poco más a nuestra pareja para encontrar un punto medio en la comprensión y el entendimiento de lo que esperan de la vida para ser felices. Buscar el momento adecuado que surja en la conversación de manera natural, a la vez debes dejar en claro tu forma de pensar, para que esa persona especial para ti, te conozca.
Quizás estés pensando que ya lo sabes o ya tienen muchos años y se conocen perfectamente. Recuerda que no es lo mismo amar cuando están enamorados que en la convivencia, ni tampoco amar a los 20 que amar a los 40. Nunca des por sentado lo que piensa o siente el
otro. Date cuenta, tu forma de pensar y sentir es diferente ahora que cuando la/lo conociste.
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Vivir un amor saludable
Partiendo de esto pueden formar una cultura del amor saludable en su matrimonio, un amor a la manera de ustedes con una historia propia, sin falsas expectativas, que se respeta mutuamente, sabiendo lo que a ambos les hace feliz.
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