Lisbeth y José se conocieron un 8 de diciembre del 2011 por cosas del destino. Aquel día Lisbeth estaba enferma e incluso con fiebre y su amiga Valeria insistía con que salieran a una discoteca. Al decirle que no podía porque estaba con fiebre, Valeria decidió aparecer en su casa y la obligó a salir.
Lisbeth se puso una inyección para sentirse mejor y salieron. Caminaban rumbo a una reconocida discoteca ubicada en Larcomar pero se perdieron, porque en esa época no existía waze, y llegaron tarde, así que eligieron entrar a otra discoteca ubicada en el mismo centro comercial. En dicho lugar estaba José con Diego, uno de sus mejores amigos. Por coincidencias de la vida, Diego conocía a Valeria y la sacó a bailar, y José saco a Lisbeth. Bailaron y conversaron casi toda la noche hasta que ella se fue porque se sentía muy mal.
José siempre dice que fue amor a primera vista porque desde que la vio le gustó y sabía que era una chica diferente a las que había conocido antes. Al día siguiente la agregó a facebook y empezó a hablarle; sin embargo, ella aún no quería estar con alguien y no le hacía mucho caso, por lo que dejaron de hablar.
Después de unos meses se volvieron a encontrar (también por obra del destino; pues ella no iba a ir a un lugar y terminó yendo). Desde ese día no se volvieron a separar. Salieron durante unos meses y en febrero del 2013 le dijo para que sean enamorados; 5 años después, le pidió la mano.
Como anécdota, el número 8 siempre ha estado presente en sus vidas. Un 8 de diciembre del 2011 se conocieron, un 8 de abril del 2012 se volvieron a encontrar, un 8 de febrero del 2013 fueron enamorados, un 8 de febrero del 2018 se comprometieron y un 8 de diciembre del 2018 se casaron. Podrían decir que es su #hashtag del amor y suerte.
Lo bueno de su relación es que se complementan muy bien, sus amigos se volvieron los suyos y viceversa. Siempre que están juntos la pasan muy bien, se ríen, hacen bromas…
Pedida de mano
Por su quinto aniversario viajaron a San Andrés (Colombia). José tenía planeado que en ese viaje le pediría la mano aprovechando la ocasión, ya que cumplían 1 año más de enamorados. El mismo día, todo parecía normal, no sospechó que José tenía la sorpresa preparada. Le dijo que celebrarían su aniversario y que había reservado una cena en un restaurante. Cuando salieron del hotel, José estaba un poco nervioso. Caminaron por el muelle y llegaron al restaurante. La señorita que los recibió les dijo que su cena era en otro lugar y la hizo voltear. Al hacerlo, había una cena romántica en la playa llena de velas y detalles bonitos. Durante la cena, José se arrodilló y le pidió la mano. Ambos lloraron de felicidad y se abrazaron.
Preparación de los novios
Lisbeth nos contó que luego de evaluar diferentes alternativas de maquilladoras la elegida fue Carolina Indacochea Make Up Artist. La novia quedó muy satisfecha con todo trabajo de peinado y maquillaje que realizó el equipo, tanto para ella como para su mamá.
El vestido fue hecho por Rosa Clará y es de la colección del 2019. Nos cuenta que fue una experiencia muy especial porque fue a comprarlo con su mamá. Ella le propuso viajar a Miami en busca de su vestido y, además, aprovechar en compartir unos días entre madre e hija. Viajaron cuatro días, de los cuales dos fueron citas en tiendas de novias. Finalmente, eligieron un vestido de la diseñadora española Rosa Clará. La experiencia fue hermosa e inolvidable, acompañada de un cruce de emociones al momento de probarse el vestido de novia.
Como anécdota, el primer vestido que se probó fue el que finalmente se llevó. “En el camino me probé más de 50 vestidos pero terminé regresando a la primera tienda.”
Además ver a su mamá tan feliz y enamorada con todo lo que estaba pasando le llenó el corazón. De hecho, compartir esa experiencia con una madre es lo mejor que se puede hacer porque Lisbeth opina que la mamá de la novia también se casa y la experiencia es de ambas. Además, fue más especial aún, al ella ser la única hija mujer.
De hecho la mamá del novio también estaba muy contenta con la boda de su hijo. Los papás de José adoran a Lisbeth y siempre confiaron en dejar a su hijo en sus manos. Ellos tienen una excelente relación y la quieren como una hija. Richard y Lily, así se llaman los papás el novio, están muy conformes con la elección de José y con la maravillosa esposa que ya tiene a su lado.
Ceremonia y celebración
Dentro de muchas opciones de iglesias decidieron realizar la ceremonia religiosa en la Capilla Nuestra Señora de la Consolación en el Colegio San Agustín, ubicada en el distrito de San Isidro en Lima, y la fecha elegida fue un 8 de diciembre del 2018.
El medio de transporte fue un carro exclusivo para los novios con un chófer que los movilizó casi todo el día. Además, arrendaron 2 vans privadas para la familia directa y evitar que se preocupen por el transporte y puedan disfrutar sin preocupaciones.
En un día tan especial los novios querían estar a la altura, por tal razón, el tocado y los aretes de Lisbeth estuvieron a cargo de Idilia y el reloj de José, fue Armani Exchange y sus gemelos de MontBlanc.
Al finalizar la ceremonia religiosa los invitados tiraron pétalos de flores y rosas como símbolo de felicitaciones y buenos deseos para la pareja. Fue un momento muy emotivo para los recién casados.
En cuanto al bouquet y arreglos florales, Lisbeth decidió confiar en Gift Garden. Las tonalidades que escogieron fueron sutiles, entre tonos blancos y de color melón.
Quienes estuvieron a cargo de capturar las imágenes del gran día fueron Omar & Teresa y los encargados de grabar fueron Happiness Films. Después de la ceremonia, la fiesta se realizó en el Club Hípico Peruano.
Desde que José le pidió matrimonio, Lisbeth inició la búsqueda de la persona que estaría a cargo de la decoración del gran día. Entre muchas opciones encontró al equipo deBoda Inolvidable, donde conoció a Evelyn Valega, quien fue la wedding planner y con quien vio todos los detalles desde el primer día.
Quisieron sorprender a sus invitados desde su llegada y al ingresar al club había una trocha larga para llegar al lugar mismo del evento, todo ese camino lo llenaron de antorchas que dirigían a un puente hermosamente decorado de luces y velas flotantes en las pequeñas lagunas que estaban a los costados. Cruzando el puente y llegando a la fiesta, encontraban una cabina de fotos de Filomena.
Ingresando a la fiesta habían 5 violinistas que tocaban en vivo mientras que se les asignaba una mesa a los invitados. En dichas mesas encontraron tarjetas personalizadas con cada nombre y un mensaje para ellos.
Luego se contactaron con Q´branta Gourmet, la empresa de catering y quienes se encargaron de la decoración y la comida. Tuvieron varias reuniones con ellos para revisar hasta el mínimo detalle. Lisbeth y José querían una boda de ensueño y elegante, y ellos hicieron que fuera posible.
Los invitados se quedaron encantados con la deliciosa comida, la decoración y los detalles (como los violinistas, mensajes personalizados para cada invitado, cabina de fotos, etc).
Cuando conocieron a Mirella y Manu de Q´branta Gourmet se dieron cuenta que eran persona increíbles y que entendieron a la perfección lo que querían y lo plasmaron en toda la decoración. “Los recomiendo, tienen un excelente gusto y su servicio es de calidad.” (Lisbeth, 2019)
Trabajar con Evelyn fue increíble porque hicieron clic desde la primera vez que se conocieron y realmente fue un gran apoyo para la novia. En menos de 1 año organizaron la boda tal cual la soñaron y estuvo con ella en cada paso. Le encantó su forma de trabajo, consejos, paciencia y gustos. Lisbeth afirmó que “la recomendaría a ojos cerrados”.
Un momento especial para ambos es haber recibido a sus familiares que viven en otros países y que hayan hecho todo lo posible por estar con ellos en un día tan especial.
José es Uruguayo y su familia paterna vive en su país. Al inicio, era difícil que todos viajen a Perú; sin embargo, fue muy emocionante verlos llegar el mismo día de la boda y a pesar del cansancio y todo el trajín estuvieron celebrando con los novios y disfrutando de su felicidad. Igual la hermana de José y su familia llegaron desde Canadá.
En una fiesta no puede faltar la música, muchos menos en una boda donde todos quieren pasarla bien. Por tal razón, para amenizarla, confiaron en el reconocido DJ Luigi.
La fiesta, la disfrutaron a más no poder, Lisbeth, no se sentó y en ningún momento dejó de sonreír. En algunos momentos se detenían para asimilar lo que estaba pasando y guardarlo en su memoria para siempre y solo agradecía a la vida por lo que estaba viviendo.
“De verdad, nunca nos habíamos sentido tan felices. Fue un día hermosamente inolvidable.” (Lisbeth y José, 2019)
Desde Zankyou les deseamos que sigan disfrutando de cada momento juntos, despertando al lado del otro por siempre. Los novios quieren agradecer de corazón a sus familias y papás por acompañarles en un momento tan especial. “Poder disfrutar con nuestros padres y darles la satisfacción de ver a sus hijos dar un paso tan importante fue muy emocionante”. De hecho, para Lisbeth es muy importante saber que su papá se siente muy orgulloso de sus hijos, “por lo que no solo era suficiente que me vea crecer profesionalmente, sino que me entregue en el altar de la forma correcta y como él siempre soñó. Era mi forma de recompensarle todo el esfuerzo que hizo por sacarnos adelante.”
Catering: Q´branta Gourmet | Fotógrafo: Omar & Teresa | Dj: Dj Luiggi | Maquillaje: Carolina Indacochea | Vestido: Rosa Clará | Tocado: Idilia | Reloj novio: Montblanc | Bouquet: Gift Garden | Recepción: Club Hípico Peruano | Wedding Planner: Boda Inolvidable
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