¡Finalmente llegó el gran día! Lo tienes todo listo: ya tienes elegido el vestido de novia, (si todavía no lo tienes te aconsejamos dar un mirada a nuestra maravillosa colección 2016), tienes el tipo de ramo, tienes elegido el menú del banquete nupcial, y ¿ahora? Ahora te toca entrar a la iglesia, caminar hacia el altar e iniciar tu vida de casada.
¡Pero, no todo es fácil como parece! Muchas esposas, a causa del momento de tensión, stress combinado con excitation y alegría, olvidan algunos pequeños detalles, que vienen totalmente cancelado de la mente. ¿Cuáles? Pues, toma nota de las 5 cosas que las novias olvidan hacer e… ¡intenta que no te suceda!
1. Camina lentamente
Si hay una cosa de la que estamos seguros, es que muchas esposas no cogen el ritmo justo al momento de caminar en la alfombra de la iglesia. No hay apuro alguno: debes tomarte tu tiempo, caminar a tiempo con la música, sonríe a los invitados, a la persona que te acompaña y sobre todo, siéntete el centro de las miradas de toda la iglesia. Eres tu la protagonista, ¡no lo olvides!
1. ¡Sonríe!
¡Sí! Puede sonar algo absurdo pero no lo es. Muchas esposas olvidan transmitir en sus rostro la felicidad que sienten por dentro. Sabemos muy bien que los nervios pueden jugarte sucio, por eso tómate un tiempo y piensa que estás viviendo el día más importante de tu vida con el hombre de tus sueños. Todo el resto deberá pasar en segundo plano, y luego… ¡sonríe, sonríe, sonríe!
3. Mira a tu novio
Es muy importante que de vez en cuando voltees a ver a tus invitados y que los hagas parte activa de la ceremonia y no como simples asistentes. También es muy común que te quedes encantada con los atuendos de tus mejores amigas, los primos que viajaron desde lejos para tu boda o con el rostro de felicidad de tu mamá, pero ¡no te olvides de tu novio! Él estará igual de nervioso que tú y te estará esperando con el corazón en la mano, entonces dale la importancia que tiene. Míralo, sonríele y enamórate más de él a cada paso.
Conozca más sobre “Álvaro García. Crónica de una boda” 4. Presta atención a las palabras y a los gestos del sacerdote
¡No te pierdas ni una sola palabra que se pronuncie durante la ceremonia! Las ceremonias religiosas son maravillosas porque son portadoras de amor puro. Escucha con atención la homilía del sacerdote, siente la emoción con el intercambio de anillos, repite convencida tus votos de boda y no te dejes influir por otros factores. ¡Vive el momento!
5. Toma de la mano a tu futuro esposo
Seguramente la ceremonia religiosa es la parte más formal de todo el matrimonio, pero estar rígida y lejana de tu novio no te ayudará a relajarte. Sería conveniente que sostengas su mano, apriétala en momentos en que la paciencia se te acaba, hasta obtener el codiciado ¡primer beso como recién casados!
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